San Isidro 2025: las cinco tradiciones que no te puedes perder, según una tiktoker
El 15 de mayo, Madrid se llena de música, color y tradición para celebrar a su patrón, San Isidro Labrador

San Isidro | Canva
Madrid rinde homenaje a su patrón un año más, San Isidro Labrador, y lo hace con una explosión de color, sabor y tradición. Mientras la ciudad vibra con música, bailes y verbenas, una joven tiktoker madrileña —cuyo contenido sobre cultura castiza acumula millones de visualizaciones— se ha convertido en la nueva guía de cabecera para los más jóvenes que quieren vivir San Isidro como un auténtico gato. Estas son las cinco tradiciones que no puedes perderte este San Isidro 2025, según esta creadora que ha revolucionado las redes con sus vídeos sobre las fiestas populares.
1. Beber agua milagrosa en la Ermita del Santo
Una de las costumbres más emblemáticas es acercarse hasta la Ermita de San Isidro, en Carabanchel, donde se encuentra la famosa fuente del santo. La leyenda cuenta que sus aguas tienen propiedades milagrosas, capaces de curar tanto males del cuerpo como del espíritu. Cada 15 de mayo, miles de madrileños hacen cola para llenar botellas con esta agua bendita, en un acto de devoción que se mantiene inalterable desde hace siglos.
2. Probar las rosquillas… y algo más
En San Isidro no se come cualquier cosa: se saborean rosquillas tontas y rosquillas listas. Las primeras, austeras y sin glaseado, representan la versión más clásica. Las segundas, cubiertas con azúcar y a veces un toque de limón, son las favoritas de los más golosos. Pero eso no es todo: en los puestos tradicionales de la pradera también se pueden degustar gallinejas y entresijos, dos delicias de casquería muy castizas que despiertan pasiones y polémicas a partes iguales.
3. Vestirse de chulapo (o chulapa)
Nada dice “San Isidro” como el traje tradicional madrileño. Las chulapas, con clavel rojo en el moño, mantón de manila y vestido entallado; los chulapos, con gorra, chaleco y clavel en la solapa. Para la tiktoker, “vestirse de época” no es solo un guiño a la tradición, sino una forma de meterse de lleno en la fiesta. Muchos optan por hacerlo al completo, pero incluso llevar algún detalle típico ya te convierte en parte del espíritu de la celebración.

4. Pasar el día en la Pradera
La Pradera de San Isidro, inmortalizada por Goya, sigue siendo el epicentro de la fiesta. Familias enteras y grupos de amigos se dan cita desde primera hora para disfrutar del aire libre, las atracciones, los conciertos gratuitos y el ambiente de verbena. Llevar comida para hacer un picnic, tumbarse en el césped y brindar con limonada son casi actos rituales. Este año, el Ayuntamiento ha preparado una programación especial con artistas emergentes y talleres para todos los públicos.
5. Aprender a bailar un chotis
“Solo hace falta una baldosa”, dicen los madrileños para describir el chotis, el baile típico por excelencia. Aunque parece sencillo, requiere compás, giro y mucho salero. La tiktoker recomienda no perdérselo: “En muchas plazas hay clases gratuitas, y los mayores lo enseñan con gusto. Es una manera preciosa de conectar generaciones”. Ya sea de la mano de un experto o improvisando en grupo, lanzarse a bailar un chotis es imprescindible para cerrar la jornada con estilo castizo.
¿Dónde comer durante el día de San Isidro en Madrid?
Además de los bailes, la romería y los trajes de chulapo, la jornada también es una auténtica fiesta para el paladar. Si estás en la capital durante el Día de San Isidro y no sabes dónde comer, aquí te ofrecemos una guía con opciones para todos los gustos, desde la clásica comida de romería hasta propuestas más contemporáneas con sabor castizo.
- Picnic en la Pradera de San Isidro: la opción más tradicional. Muchos madrileños llevan su comida y disfrutan de platos típicos como gallinejas, entresijos o rosquillas en plena romería.
- Tabernas y bares del centro: en zonas como La Latina o Lavapiés, se pueden encontrar clásicos como el cocido madrileño, torreznos o huevos rotos. Ideales para una comida castiza y con historia.
- Restaurantes con menús especiales: lugares emblemáticos como Casa Lucio o La Bola ofrecen menús tradicionales especialmente diseñados para estas fiestas.
- Dulces típicos de San Isidro: imprescindible probar rosquillas tontas y listas, barquillos y limonada madrileña. Se encuentran en panaderías tradicionales o puestos callejeros.
- Gastronomía castiza con toque moderno: restaurantes contemporáneos reinterpretan la cocina madrileña para los paladares más exigentes, sin perder la esencia festiva.